CORTÁZAR Y EL JAZZ (Seminario con Mercedes Serna)

Descripción:

La música tiene una influencia fundamental en la obra y en la vida de Cortázar. El protagonista de El perseguidor, Johnny Carter, y el de Rayuela, Horacio Oliveira, tienen muchos aspectos en común. Ambos son hombres derrotados humanamente, fracasados, personajes de búsqueda, influidos por el jazz. Cortázar explicó que con El perseguidor comenzó a abordar un problema de tipo existencial y humano que posteriormente se amplificó con Rayuela. El argentino leyó la biografía del músico Charlie Parker, tras su defunción en 1955, y quiso recrear el mundo de la literatura con base en otra manifestación artística para abrir las secuencias narrativas entre el tiempo cronológico y el íntimo. Pretendió liberarse de la estructura cerrada que había creado en su producción anterior, a través de la música de jazz. El perseguidor es un esbozo, dicho por Cortázar, de lo que luego sería Rayuela, novela donde pone en práctica la teoría literaria novelística que aprende a partir de la música del jazz. Así, Oliveira, la Maga, Ronald, Perico y los demás miembros del Club de la Serpiente son amantes de la música. Estos comentan en dicha obra piezas de Dizzy Gillespie, Bessie Smith o Lester Young. El jazz ya no está representado, en Rayuela, en un protagonista en concreto sino que forma parte de la base estructural de la novela, por cuanto esta se va a conformar a partir de las partituras de dicha música.

En este taller vamos a trabajar, por lo tanto, la relación íntima que existe entre la escritura de Cortázar y el jazz, así como la poética y teoría de la novela de Julio Cortázar en relación a su pasión por la música de jazz. El creador y el intérprete se fusionan tanto en el jazz como en la tercera parte de Rayuela. Asimismo, el lenguaje inventivo une esta parte de la novela y el carácter de dicha música. Se trata de la idea de la multiplicidad como el valor literario más actual y moderno: el hipertexto.